lunes, 1 de noviembre de 2010

Un ladrillo como hogar.

Este lución escogió como hogar, durante unos días en el otoño de 2008, un viejo ladrillo de arcilla abandonado en un rincón de mi huerta. Esta es una imagen que demuestra como algunos animales aprovechan los nuevos elementos que aportamos diariamente al entorno donde nos movemos, ellos intentan adaptarse a nuestros cambios, hay especies de animales que lo hacen rápido y parece beneficiarles los entornos humanizados, pero otras, la inmensa mayoría, no son capaces de seguir nuestro ritmo brutal de transformación de los ambientes en los que nos movemos, esto provoca que muchas especies no consigan esa adaptación a tiempo y se nos vayan quedando por el camino.

1 comentario:

  1. ¡¡A ver si te vas a aficionar a los reptiles!! La verdad es que es muy bonita. Los luciones son animales bastante peculiares. Un saludo.

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